jueves, 13 de diciembre de 2012

Antonio Garrido: 'Los amigos de Facebook no son amigos'


- El actor, ahora en la gran pantalla con 'Fin', ha hecho teatro, cine y televisión 
- En la cinta intepreta "al 'españolito' que dice cosas políticamente incorrectas" 
- Confía en la industria: "Cada vez se hace mejor cine y mejores películas"
  
 Verónica Forqué contaba que de pequeña quería ser sevillana, porque le sonaba a ser artista, actriz y olé. Según eso, podríamos decir que Antonio Garrido aúna tres facetas del arte: es actor, presentador... también y sevillano. Como otros tantos actores, empezó en el teatro, y uno de sus primeros papeles fue en 'Bajarse al moro', ya ven, esa obra que llevó al cine precisamente Verónica Forqué. En televisión lo hemos visto poner nerviosos a los concursantes de 'Identity' y 'Quién quiere ser millonario' y en series como 'La chica de ayer' y 'Los protegidos'. Por último, en el cine, nos ha acostumbrado a su voz de radio gracias a sus personajes en 'El camino de los ingleses', 'Siete minutos' o 'La chispa de la vida'.

Ahora mismo tiene en cartel 'Fin', el debut apocalíptico de Jorge Torregrossa, en el que hace mutis antes que sus compañeros, pero también lleva el peso de la parte más adulta, madura y quizá menos desvariante de la película. 


Antonio, yo no sé si será una cuestión generacional, pero la primera parte de 'Fin' es la que más me interesa, porque parece una de estas películas francesas o canadienses de catarsis de grupo, como 'Pequeñas mentiras sin importancia' o 'Las invasiones bárbaras' de Denys Arcand…

Para mí la película tiene dos partes fundamentales: esa primera en la que vemos las relaciones sociales y personales de un grupo de amigos que hace veinte años que no se ven, con todas sus miserias y sus pequeñas mentiras, y la segunda mitad, que es la parte apocalíptica de la película. Yo solo estoy en la primera, y me parece muy interesante el escenario de unos amigos que hace veinte años que no se ven, que se vuelven a ver y que habría que preguntarse por qué no se habían vuelto a ver en veinte años.

Y supongo que el mérito de la película es precisamente la combinación de estas dos partes, que puede interesar a públicos de distinta edad, ¿no?

Creo que Jorge, el director, tenía una papeleta difícil al basar un guión en una novela que había sido un best seller donde se cuentan tantas cosas. Y creo que la elección que ha hecho ha estado bien, y las dos vías principales, como tú bien dices, atraen a todo tipo de público: habrá gente a la que le interese el rollo de estas relaciones y habrá gente a la que le interesen las peripecias de los protagonistas.

Yo soy un poco escéptico con este tipo de encuentros en la vida real y que en el cine nunca salen bien. Digo yo que si llevamos 20 años sin vernos será por algo. (Risas) A ti te toca el papel pesimista o realista. El que dice: 'Esto no va a salir bien'...

Yo creo que mi personaje (Rafa) es un tipo que representa al españolito medio, pero no por nada, sino porque dice cosas que son políticamente incorrectas pero que todos pensamos. Rafa va a esa reunión porque va su mujer, si no no iría, y cuando llega, les dice: 'A ver qué coño tengo que hacer con esta pandilla, qué tengo yo que hablar con vosotros, si hace mucho tiempo que no tenemos nada de qué hablar'. Había una secuencia que luego no se montó, y que fue con la que yo hice el casting, en la que ponía a parir a la gente comparándola con cómo está el país y cómo está el patio ahora mismo. Y decía cosas que la mayoría pensamos, pero que es políticamente incorrecto decir porque alguien ha decidido que es políticamente incorrecto. Pero él lo dice en voz alta.

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 Yo me acuerdo de una entrevista que tuvimos cuando rodaste 'Siete minutos', una película que se basaba en esos breves encuentros entre dos personas de distinto sexo (o del mismo) programados por agencias para buscar pareja. Recuerdo que hablamos de cómo se estaba perdiendo la costumbre de quedar y hablar en los bares. Y eso me hace pensar en Twitter y Facebook, que se utiliza mucho para quedar y reencontrarse con antiguos amigos. Pero a lo mejor si no me he reencontrado hasta ahora, es que no quería reencontrarme...

¿Y quién te ha dicho a ti que me quiero reunir con antiguos amigos? (Risas) Sí, sí, efectivamente, ahí está la cosa. Aparte de que Facebook y Twitter mienten, porque la gente te dice: 'Mira, tengo no sé cuántos amigos'. No, los amigos de Facebook no son amigos. Lo malo es que las nuevas generaciones sí que creen que son amigos de verdad. Twitter por lo menos los llama 'seguidores', pero Facebook te dice 'tienes 500 amigos'. Y lo peor es que la gente está utilizando ya el término 'amigo' como si fueran iguales que los amigos de verdad, con los que quedas de vez en cuando y te tomas una copa en los bares.

Entiendo que tú no eres muy de redes sociales...

Pues a fuerza de pan voy entrando en las redes sociales porque no queda más remedio... pero no, no soy mucho.

Tú has sabido combinar a lo largo de tu carrera las diferentes facetas que puede tener un actor, incluyendo la de presentador de televisión. Ahora que las cosas están fallando estrepitosamente, ¿a cuál de estas caras crees que puedes agarrarte más fuertemente en los tiempos que corren?
 

Mira, yo todo esto de cine, teatro o televisión... yo siempre recuerdo la anécdota de Fernando Fernán-Gómez, que le llegó el representante y le dijo: 'Mira, Fernando, nos han ofrecido esta película, pero el guión no es muy bueno, el director es novel, el catering va a ir muy justo y pagar, no pagan mucho'. Y dijo Fernando Fernán-Gómez: 'Bueno, pues, hacemos otra película'. Y le dijo el representante: 'Es que no hay otra película'. Y Fernán-Gómez: 'Entonces ¿de qué me estás hablando? ¡Tenemos que hacerla!'... Pues esto es un poco así. Cine, teatro, television... ¿hacia dónde hay que encaminarse? Pues yo creo que hay que estar preparado, ser versátil y capaz de hacer todas las cosas. Como alguien dijo en algún momento, hay que torear en todas las plazas.

Una de las frases promocionales de 'Fin' era "No quedará nadie". Parece un claim perfecto para el cine español: tal y como está dándose este año, tampoco va a quedar nadie...

(Risas) No, no quedará nadie... Pero sin embargo, si te das cuenta, dos de las últimas películas que más taquilla han hecho aquí en España han sido españolas: 'Lo imposible' y 'Tadeo Jones'. Y son dos producciones españolas que han batido todos los récords de audiencia en época de crisis. Lo que yo creo es que hay unos señores, mejor dicho, hay unos políticos que no tienen ni idea de cómo va esto, que nos suben el IVA, que nos ponen todas las trabas habidas y por haber, y sin embargo la industria española va haciendo cada vez mejor cine y mejores películas, conocidas y reconocidas internacionalmente. Y eso será por algo.

Esperemos, en tal caso, que esta hecatombe no sea el 'Fin'. Gracias, Antonio.

    Etiquetas:
    Cine y TV
    - José María Clemente
Fuente: Vanity Fair

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